Mi cuerpo es arte vivo

Junio 3

Edad: 25 años
Ubicación: Denver, Colorado, Estados Unidos


Illustration by Sandro Botticelli


Quiero estar presente desde ahora como creadora en la construcción de mis recuerdos. A veces, parece que te pierdes completamente en mí, sales corriendo sin saber qué hacer. Estoy escuchando el sonido que sale de mi boca cuando grito de placer.

Leí algo sobre esto a principios de marzo, cuando Rupi Kaur escribió: “La masturbación es meditación”. Me encerré en el espacio de mi habitación actual, llena de sábanas blancas de un material especial para mi piel. Pude sentirme y sabe a gloria. Pude sentir mi propia energía y la necesidad de protegerla celosamente.

En el espacio actual donde mi cuerpo despierta cada mañana y cierra los ojos al dormir, a plena luz del día, mi cabello suelto brillaba al toque de la luz. Mis ojos se perdían en algo más allá de las limitaciones de mi cuerpo humano, hasta quedarme sin respiración, hasta ir y regresar al mismo tiempo. Lo que yo producía en esa escena terminaba dando un brillo tan especial a toda mi piel. De repente, la idea que yo tenía acerca del sexo cambió completamente y se convirtió en algo sagrado.

El cuerpo humano es un canal de transmisión con diferentes entradas y salidas, es receptor y también emisor. Si lo pones en sintonía con otro cuerpo humano y la frecuencia de este no es apta para la tuya, el mensaje no irá a ningún lado. Simplemente se encenderán ambos aparatos que hacen suceder las frecuencias, pero sin éxito de captar ninguna señal que pueda escucharse y producirse claramente. La emoción de hacerlo encenderá, pero cuando se desconecte, la frecuencia que en solitario produces acerca de ti mismo y de quién eres hasta ahora, y a dónde vas en el proceso de tu camino, se verá perturbada. Tu frecuencia puede sentirse perdida, sin sustancia, y de nuevo tendrás que buscar un camino que te regrese a ti mismo, a la frecuencia que emites. Pero sin saberlo, la puedes volver a perder al entregar acceso a tu sagrado cuerpo a una energía con la que no has sentido ni logrado ninguna conexión.

Cuando el canal se abre a la producción conjunta de algo que ha logrado una clara conexión, es cuando se entrega en cuerpo y alma a ese otro emisor que ha emparejado esa energía. Se hace una unión que transciende cualquier limitación del cuerpo humano y logra una comunicación que se escucha claramente en ese espacio en donde se funden. Se siente como acceder al espacio en donde la nada y el todo ocurre, esperando a que se tome una decisión para ver cuál es el deseo de lo que se quiere manifestar para poder lograr la experiencia. Y es en ese momento en donde cualquier idea del YO desaparece, y se siente como estar en casa. Se siente seguro como un recordatorio de quienes verdaderamente somos, porque es donde toda idea de separación desaparece y el UNO es la única unidad para contar el infinito que necesito. Nos es necesaria una estructura matemática que ordene la construcción de lo que sea que estamos haciendo suceder aquí en nuestra representación de nuestros caracteres, porque en la entrega de lo que nos hace sentir vivos, el todo se deja suceder sin ninguna explicación y esa energía se transforma en una creatividad que pide a gritos ser materializada. Y lograr esta conexión con el otro cuerpo es extremadamente raro, porque no todos los seres humanos están viviendo siendo ellos mismos y desde su auténtico movimiento allá afuera. Entonces, me haré responsable y consciente de cuidar la entrada secreta al paraíso eterno.

Venus Anadyomène, 1838 by Theodore chasseriau

Mi piel es delicada, es una creación dedicada a la experiencia de mi alma. Todo lo que hace suceder mis interacciones corporales con su entorno se crea primero desde una conciencia buscando verse a sí misma en material. El color de mis ojos y la mirada que le permite ver esta realidad buscan crear escenarios dignos de ser fotografiados, y te tengo capturado desde diferentes ángulos. Hay un momento ahí en donde pude tomar captura de ese 1 que logramos formar, y nadie va a quitarnos eso. Está en mí como lo está en ti. Permitimos el acceso porque la corriente que nos hizo conectar se sintió destinada a hacerse suceder. Nunca quise que te fueras, pero en el no matrimonio de la unión, parece que solo fue un momento y aunque haya sido efímero, me hiciste sentir tanto. Aun en la calma de nuestras desconocidas historias, la energizante sensación de querer estar juntos estaba completamente enloquecida. También lo estaba de mi parte. Ahora ha empezado este proceso de desasociarte de mí, y es difícil.

Illustration by Sandro Botticelli

En esa cama desordenada a pleno mediodía después de subir y bajar del cielo, me he prometido a mí misma entregarme solo al hombre que sienta y decida amar. Mi cuerpo y su movimiento son sagrados, no es algo que ves en un video pornográfico. Es una desnudez pura que te ve a los ojos y se entrega desde toda su eterna existencia. Es una cara que llenará de besos la tuya al despertar cada mañana. Mi existencia es una que te preguntará cómo está la tuya, que querrá conocer hasta el primer recuerdo que tienes de tu humanidad, que se bañará contigo y masajeará tu cabello mientras te da besos en la espalda y te abraza tan apretado. Es una que se moverá contigo en medio de la cama y te acariciará el alma. Es una que se entregará a ti como una mujer debe entregarse a un hombre desde su pureza, inocencia y ese deseo de experimentarse a través del hombre que la respeta, la cuida, la protege y la ve como su más preciado tesoro. En donde mi expresión y su feminidad envuelta en ella no representen debilidad, sino más bien la seguridad de estar con aquel que llamaré mi hombre para siempre, aquel que me abrace en todas mis formas y no se sienta intimidado por ninguna de ellas. Y aun cuando cumpla hasta el más imposible de mis sueños, él pueda saber que su presencia en mi vida es tan vital como la mía propia.

Illustration by Sandro Botticelli

Te amo, Katheryn.

Leave a comment